Las imágenes de un león marino que crece y enfrenta las adversidades del entorno natural en el archipiélago volcánico de Galápagos (Ecuador) en un documental de Disney han sido la cara 'dulce' del cuestionado proyecto de seguridad acordado con EE.UU., que permite la presencia de una base militar de ese país en el conjunto de islas del Pacífico.
La Embajada estadounidense en Ecuador ha compartido videos de la película 'Leones marinos de las Galápagos' —dirigida por Hugh Wilson y con imágenes satelitales de la NASA— y la ha calificado como "un ejemplo del liderazgo de EE.UU. en innovación tecnológica, artística y cultural a favor del mundo y del Ecuador".
Más allá del registro minucioso hecho por Disney de Galápagos —la segunda reserva marina más grande del mundo, con una superficie de 133.000 km²— se encuentran los acuerdos militares establecidos en los gobiernos de Lenín Moreno, Guillermo Lasso y de Daniel Noboa con Washington, que han sido criticados por considerarlos una pérdida de soberanía, entrega de territorio y una amenaza para la biodiversidad de las 13 islas.
Un acercamiento progresivo
Este acercamiento con Ecuador, que ha venido consolidándose con los distintos presidentes luego de Rafael Correa, pareciera hacerse aún más estrecho conforme China estrecha sus relaciones con la región latinoamericana, en plena guerra de aranceles. Y es que Ecuador ya estableció un acuerdo de libre comercio con el país asiático hace exactamente un año.
Así, mientras que China apuesta al afianzamiento de las relaciones comerciales en la región, a través de mecanismos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), EE.UU. avanza en una política que pone el acento en la seguridad y lo militar, más que en fortalecimiento de la economía de los países latinoamericanos.
Drogas, turismo y seguridad
En una publicación sobre la "primera visita oficial" del nuevo embajador estadounidense en Ecuador, Arthur W. Brown, al territorio ecuatoriano reconocido mundialmente por su biodiversidad y relevancia científica, se notifica que se reunió con autoridades locales, de seguridad y justicia; del Parque Nacional y de centros académicos de investigación.
El objetivo, según información de la Embajada, "fue abordar prioridades compartidas en este destino de interés para los turistas estadounidenses". Sin embargo, en la publicación no se deja de destacar que EE.UU. quiere "poner fin al tránsito de drogas hacia suelo estadounidense para proteger su seguridad nacional" y que "colabora con autoridades en la zona para apoyar los esfuerzos de control marítimo contra las organizaciones criminales transnacionales y actores malignos que operan en alta mar".
Estas acciones, que comprenden un documental sobre leones marinos, temas turísticos y "objetivos de seguridad" estadounidenses "para frenar el narcotráfico y la pesca ilegal", tienen como fondo el criticado 'Proyecto de Seguridad Integral en la Región Insular' y el 'Instructivo para la aplicación de los acuerdos de cooperación entre Ecuador y EE.UU.', vistos como un cuestionado aval del país suramericano para entregar su territorio.
"Vergonzoso y peligroso"
En el 'Proyecto de Seguridad Integral en la Región Insular', emitido en diciembre de 2024, se establece la "cooperación entre las Fuerzas Armadas del Ecuador con el Gobierno de EE.UU. para hacer frente a los retos de seguridad compartidos en la Región Insular".
En el documento se manifiesta que se autoriza la construcción de "facilidades" adicionales en puertos y aeropuertos locales, así como la presencia de personal militar y civil estadounidense, que gozará de privilegios y exenciones equivalentes a los de los diplomáticos. Esto ha sido visto como la luz verde de Quito para que se haga una base militar estadounidense en el archipiélago.
Al respecto, el exvicecanciller Fernando Yépez dijo en su oportunidad que lo acordado era "inaceptable, vergonzoso, peligroso e indigno servilismo colonial". Además, añadió que había sido hecho sin "conciencia de la soberanía nacional, ni de los intereses del Ecuador ni de las experiencias negativas con bases militares extranjeras, siempre de EE.UU.", según el Comité para la Abolición de las Deuda Ilegítimas.