El reciente ataque de drones contra aeródromos y otras infraestructuras en varias provincias rusas no obstaculizará que Rusia siga actuando en la zona de la operación militar especial, según un artículo de The New York Times publicado el martes que cita a funcionarios estadounidenses.
Un alto cargo del país norteamericano señaló que "el ataque por sí solo no obligaría a Rusia a reducir sus operaciones ofensivas" en el frente.
Asimismo, funcionarios estadounidenses esperan que Moscú tome "represalias significativas" contra Kiev por los atentados.
El Ministerio de Defensa de Rusia comunicó el domingo que el régimen de Kiev perpetró un atentado terrorista con drones FPV (con visión en primera persona) contra aeródromos en las provincias rusas de Múrmansk, Irkutsk, Ivánovo, Riazán y Amur.
El organismo indicó que todos los ataques contra los aeródromos militares, ubicados en las provincias de Ivánovo, Riazán y Amur, han sido repelidos.
Al mismo tiempo, detalló que "en las provincias de Múrmansk e Irkutsk, como resultado del lanzamiento de drones FPV desde un territorio situado en las inmediaciones de los aeródromos, se incendiaron varias unidades de equipo aeronáutico". Añadió que los incendios han sido extinguidos.
En este contexto, el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, aseguró que "la represalia es inevitable". "Nuestro Ejército avanza activamente y seguirá avanzando. Todo lo que deba explotar, sin duda explotará, y quienes deban ser exterminados desaparecerán", escribió en su cuenta de Telegram.